CARNAVALES

Ya han pasado muchos años, fueron los carnavales de 197l cuando aún sólo teníamos cuatro hijos y el quinto aún tardaría en venir casi tres años.
Las edades que tenían en éste momento oscilaban entre los siete del mayor y los dos y poco de la menor.

















El parvulario Vilar era el centro en el que iniciaban sus actividades escolares y que sería el último año para los tres primeros, que a partir de Septiembre ya pasarían a colegios de primera enseñanza.

La directora y las señoritas que impartían los primeros conocimientos en éste jardín infantil, estimulaban a los padres para que con la imaginación y la pericia de las madres, confeccionaran unos disfraces para celebrar la fiesta de jueves de carnaval.
Como en otras ocasiones, la habilidad y la creatividad de su madre se pusieron manos a la obra y el resultado fueron estos simpáticos disfraces, que ilusionados con el atuendo, no tuvimos mas remedio que hacer una sesión fotográfica para dejar testimonio de tan felices carnavales.

















A pesar del tiempo transcurrido, mantenemos viva en nuestra memoria cada uno de los momentos de felicidad que todos juntos disfrutamos en esos inolvidables carnavales.