22.4.04

Hace ya muchos años, casi cincuenta, de una pequeña historia que siempre me ha quedado marcada en mi memoria, por lo de surrealista e improvisada.

A media mañana recibimos una llamada telefónica de un buen cliente, le era urgente que le enviáramos un pedido de agua mineral con la máxima urgencia.
Como en aquel momento los dos camiones de reparto estaban cumpliendo con su ruta, decidió mi padre recabar la ayuda de un mozo del mercado de Galvany, que tenía una carretilla que utilizaba para transportar las verduras dentro del recinto.

Dicho y hecho. Sobre tan peculiar vehículo, cargamos quince cajas de 50 botellas de ¼ de litro de AGUA IMPERIAL y acompañando al conductor de tan singular transporte, nos encaminamos hacia nuestro destino: El bar del
  • ORO DEL RHIN
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    El itinerario desde Mariá Cubí hasta Rambla Catalunya cantonada Gran Vía, fue una odisea. Una vez llegados a destino, había que situar la mercancía en un montacargas que lo colocaba en la bodega subterránea.
    Lo que yo ignoraba en aquel tiempo, era la importancia que éste local había tenido y tenía en la historia de Barcelona y los personajes que desfilaron por sus salones.
    Hoy disfruto de unos conocimientos que me transportan a la historia vivida en éste querido y jamás olvidado
  • BAR ORO DEL RHIN
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